LAS ARAÑAS
Las arañas pueden ser criaturas tanto interesantes como temibles. Existen varias tipos de arañas y se diferencian generalmente por el tamaño y la coloración. Lo que puede sorprender, es que las más grandes no son tan peligrosas como algunas más pequeñas. Algunas de ellos se mezclan tan bien con su entorno que ni siquiera puede notarse que están alrededor. Todas ellas tienen cuatro pares de patas, con un total de ocho. También tienen cuatro pares de ojos que utilizan para ayudarse pues no tienen un buen sentido del equilibrio. La zona abdominal de una araña es donde se hace la seda con la que se fabrican las redes o telas.
Las arañas en general, se mueven lentamente, pues no tienen que preocuparse demasiado por los depredadores La mayoría de ellas possen un veneno muy potente capaz de paralizarlos. Hay varios tipos de arañas con veneno lo suficientemente fuerte como para enfermar , incluso matar, a los seres humanos . Como resultado, muchas personas le tienen miedo a las arañas. Tendemos a hacer todo lo posible para sacarlos de sus casas y sus hábitats. Con los seres humanos invadiendo continuamente el territorio de las arañas, estas últimas están teniendo dificultades para encontrar lugares en los que no se encuentre el hombre.
El proceso de apareamiento de los machos y las hembras también resulta interesante. Las hembras son mucho más grandes que los machos. Los machos entregan los espermatozoides en un lugar y luego la hembra se lo inserta en su cuerpo. En muchos casos, los machos serán consumidos por la hembra después de que haya tenido lugar el apareamiento. No se entiende completamente por qué ocurre esto. Como resultado, las arañas más maduras que observan van a ser hembras. Ponen hasta 30.000 huevos de una vez en algunas especies.
La mayoría de las arañas no viven más de unos pocos meses porque los depredadores parásitos y enfermedades las matan a mucho antes de que envejezcan y mueran. Aquellas que completen su ciclo de vida suelen durar al menos un año de la etapa de huevo a adulto. Sin embargo, las arañas mantenidas en cautiverio han demostrado sorprendente longevidad. Algunas tarántulas hembras, por ejemplo, pueden vivir más de veinte años.


